Nuevas publicaciones en el Blog de Historia del Movimiento Obrero en Guadalajara

. miércoles, 3 de noviembre de 2010
  • Agregar a Technorati
  • Agregar a Del.icio.us
  • Agregar a DiggIt!
  • Agregar a Yahoo!
  • Agregar a Google
  • Agregar a Meneame
  • Agregar a Furl
  • Agregar a Reddit
  • Agregar a Magnolia
  • Agregar a Blinklist
  • Agregar a Blogmarks

1856-1857.CRISIS DE SUBSISTENCIAS Y CONFLICTIVIDAD SOCIAL EN LA PROVINCIA DE GUADALAJARA.

“Centrada la vida económica del país en torno a la agricultura tradicional, las crisis de subsistencias influían en las demás actividades económicas, en las condiciones sociales y en la coyuntura política.”[1] Con estos términos expresaba el profesor Sánchez Albornoz las circunstancias que acompañaban a uno o mas años de mala cosecha en países se economía atrasada-como lo era España entonces y lo seguiría siendo durante muchos años- donde se empleaban: “técnicas rudimentarias que exigían escasa inversión de capital y abundante empleo de mano de obra, subsistían intactas desde tiempos inmemoriales y mantenían estancados los rendimientos por par de brazos dedicados a la tierra” [2] y les hacía ser especialmente sensibles a los factores meteorológicos lo que encarecía el precio del pan y otros alimentos de primera necesidad, con el consiguiente debilitamiento de los organismos y su saldo de “aumento de defunciones, postergación de matrimonios y retracción de concepciones”[3].Los problemas de la agricultura española estaban determinados en gran medida por los resultados de las sucesivas desamortizaciones de Mendizábal y Madoz, de las que había resultado una muy desigual estructura de propiedad de la tierra y con ella un empeoramiento de las condiciones de vida de campesinos pobres y jornaleros, que al no ir acompañadas de un desarrollo industrial, hará que el excedente de mano de obra en el campo sea un freno para su mecanización. Las crisis de subsistencias, propias de la sociedad del Antiguo Régimen se mantendrán en España hasta bien entrado el siglo XX, e irán acompañadas de una gran conflictividad social. El desarrollo del intento de revolución liberal conocida como “Bienio Progresista” estará condicionado en parte por el malestar popular causado por las dificultades alimentarías de esos años, que en la provincia de Guadalajara se van a vivir intensamente.

Pincha aquí para leer mas.

Notas autobiográficas de Marcelino Camacho

Marcelino Camacho Abad de profesión fresador, casado y con dos hijos, nace el 21 de enero de 1918 en Osma la Rasa (Soria) en una familia de ferroviarios. Su padre es guarda-agujas y su madre guarda-barrera.

Cursa estudios primarios con el sacerdote Feliciano Oliva Bocos, entonces maestreo en el pueblo, y que desea que Marcelino ingrese en el seminario de Burgo de Osma. Y, como todos lo que entonces eran alumnos, es monaguillo mientras va a la escuela. Su padre, que es respetuoso para la religión, viejo militante de la UGT (Sindicato Nacional Ferroviario), y el propio interesado, deciden responder amistosa pero negativamente al deseo del sacerdote.

Terminada la enseñanza primaria, hace el aprendizaje para ingresar en los ferrocarriles, como su padre y como su abuelo. En esta situación le sorprende el 18 de Julio de 1936.

Único hijo varón de una familia de cuatro hermanos, todos de la primera esposa de su padre, a los 9 años ve morir a su madre y a su hermana Nati seguidamente. Después estando encarcelado en la Prisión de Comendadoras de Madrid, en 1941 conocería la muerte de su hermana mayor, Josefa, y posteriormente, en 1969, el fallecimiento de su padre le sorprendería nuevamente preso en la cárcel de Carabanchel.

En enero de 1935 ingresó en el Sindicato de Oficios Varios (UGT) de Osma la Rasa, que en unión de otros reorganizó. Militó en UGT hasta mediados de la década de 1950.

Pulsa aquí para leer mas.

0 comentarios:

ir arriba